lunes, 28 de febrero de 2011

LECCIÓN 059 Para los repasos de mañana y noche: Lección 41-45

LECCIÓN 059

Para los repasos de mañana y noche: Lección 41-45

Estas son las ideas a repasar hoy:

(41) Dios va conmigo dondequiera que yo voy.
¿Cómo puedo estar solo cuando Dios está siempre conmigo. ¿Cómo puedo dudar o sentirme inseguro cuando en Él mora la perfecta certeza? ¿Cómo puede haber algo que me pueda perturbar cuando Él mora en mi en paz absoluta? ¿Cómo puedo sufrir cuando el amor y la dicha me rodean por mediación Suya? No he de abrigar ninguna ilusión con respecto a mi mismo. Soy perfecto porque Dios va conmigo dondequiera que yo voy.
(42) Dios es mi fortaleza. La visión es Su regalo.
Hoy no recurriré a mis propios ojos para ver. Quiero estar dispuesto a dejar de lado la lamentable ilusión de que puedo ver, e intercambiarla por la visión que Dios me da. La visión de Cristo es Su regalo y Él me lo ha dado. Hoy me valdré de este regalo de tal forma que este día me ayude a comprender la eternidad.
(43) Dios es mi Fuente. No puedo ver separado de Él.
Puedo ver lo que Dios quiere que vea. No puedo ver nada más. más allá de Su Voluntad sólo hay ilusiones. Son éstas las que elijo cuando pienso que puedo ver separado de Él. Son éstas las que elijo cuando trato de ver con los ojos del cuerpo. No obstante, se me ha dado la visión de Cristo para reemplazarlos. A través de esta visión es como elijo ver.
(44) Dios es la luz en la que veo.
No puedo ver en la obscuridad. Dios es la única luz. por lo tanto, si he de ver, tiene que ser por medio de Él. He tratado de definir lo que es ver y me he equivocado. Ahora se me concede poder entender que Dios es la luz en la que veo. Le daré la bienvenida a la visión y al mundo feliz que me mostrará.
(45) Dios es la Mente con la que pienso.
No tengo pensamientos que no comparta con Dios. No tengo pensamientos aparte de los Suyos porque no tengo otra mente que la Suya. Puesto que soy parte de Su Mente mis pensamientos son Suyos, y Sus Pensamientos son míos.

domingo, 27 de febrero de 2011

El mundo Real - Una manera distinta de ver el mundo

LECCIÓN 058 Para los repasos de mañana y noche: Lección 36-40

LECCIÓN 058

Para los repasos de mañana y noche: Lección 36-40


Hoy vamos a repasar las siguientes ideas:

(36) Mi santidad envuelve todo lo que veo.

De mi santidad procede la percepción del mundo real. Habiendo perdonado, ya no me considero culpable. Puedo aceptar la inocencia que es la verdad con respecto a mi mismo. cuando veo el mundo con los ojos del entendimiento, sólo veo su santidad porque lo único que puedo ver son los pensamientos que tengo acerca de mi mismo.

(37) Mi santidad bendice al mundo.

La percepción de mi santidad no me bendice únicamente a mi. Todas las personas y todo cuanto veo en su luz comparten la dicha que mi santidad me brinda. No hay nada que esté excluido de esta dicha porque no hay nada que no comparta mi santidad. A medida que reconozca mi santidad, la santidad del mundo se alzará resplandeciente para que todos la vean.

(38) No hay nada que mi santidad no pueda hacer.

El poder curativo de mi santidad es ilimitado porque su poder para salvar es ilimitado. ¿De qué me tengo que salvar, sino de las ilusiones? ¿Y qué son las ilusiones sino falsas ideas acerca de mi? Mi santidad las desvanece a todas al afirmar la verdad de lo que soy. En presencia de mi santidad, la cual comparto con Dios Mismo, todos los ídolos desaparecen.
Wa.r1.58/4 (39) Mi santidad es mi salvación.

Puesto que mi santidad me absuelve de toda culpa, reconocer mi santidad es reconocer mi salvación. Es también reconocer la salvación del mundo. Una vez que haya aceptado mi santidad, nada podrá atemorizarme. Y al no tener miedo, todos compartirán mi entendimiento, que es el regalo que Dios me hizo a mi y al mundo.

(40) Soy bendito por ser un Hijo de Dios.

En esto reside mi derecho a lo bueno y sólo a lo bueno. Soy bendito por ser un Hijo de Dios. Todo lo que es bueno me pertenece porque así lo dispuso Dios. Por ser Quien soy no puedo sufrir pérdida alguna, ni privaciones ni dolor. Mi Padre me sustenta, me protege y me dirige en todo. El cuidado que me prodiga es infinito y eterno. Soy eternamente bendito por ser Su Hijo.

sábado, 26 de febrero de 2011

Habito 4 - Los siete hábitos de la gente altamente efectiva. Pensar. Ganar-Ganar

LECCIÓN 057 Para los repasos de mañana y noche: Lección 31-35

LECCIÓN 057

Para los repasos de mañana y noche: Lección 31-35

Repasemos hoy las siguientes ideas:
(31) No soy víctima del mundo que veo.
¿Cómo puedo ser la víctima de un mundo que podría quedar completamente des-hecho si así lo erigiese? Mis cadenas están sueltas. Puedo desprenderme de ellas sólo con desearlo. La puerta de la prisión está abierta. Puedo marcharme en cualquier momento sólo con echar a andar. Nada me retiene en este mundo. Sólo mi deseo de permanecer aquí me mantiene prisionero. Quiero renunciar a mis desquiciados deseos y caminar por fin hacia la luz del sol.
(32) He inventado el mundo que veo.
Yo mismo erigí la prisión en la que creo encontrarme. Basta con que reconozca esto y quedo libre. Me he engañado a mi mismo al creer que era posible aprisionar al Hijo de Dios. He estado terriblemente equivocado al creer esto, y ya no lo quiero seguir creyendo. El Hijo de Dios no puede sino ser libre eternamente. Es tal como Dios lo creó y no lo que yo he querido hacer de él. El Hijo de Dios se encuentra donde Dios quiere que esté y no donde yo quise mantenerlo prisionero.
(33) Hay otra manera de ver el mundo.
Dado que el propósito del mundo no es el que yo le he asignado, tiene que haber otra manera de verlo. Veo todo al revés y mis pensamientos son lo opuesto a la verdad. Veo el mundo como una prisión para el Hijo de Dios. Debe ser, pues, que el mundo es realmente un lugar donde él puede ser liberado. Quiero contemplar el mundo tal como es y verlo como un lugar donde el Hijo de Dios encuentra su libertad.
(34) Podría ver paz en lugar de esto
Cuando vea el mundo como un lugar de libertad, me daré cuenta de que refleja las leyes de Dios en lugar de las reglas que yo inventé para que él obedeciera. Comprenderé que es la paz, no la guerra, lo que mora en él. Y percibiré asimismo que la paz mora también en los corazones de todos los que comparten este lugar conmigo.
(35) Mi mente es parte de la de Dios. Soy muy santo.
A medida que comparto la paz del mundo con mis hermanos empiezo a comprender que esa paz brota de lo más profundo de mismo. El mundo que contemplo ha quedado iluminado con mi la luz de mi perdón y refleja dicho perdón de nuevo sobre mi. En esta luz empiezo a ver lo que mis ilusiones acerca de mi mismo ocultaban. Empiezo a comprender la santidad de toda cosa viviente, incluyéndome a mi mismo, y su unidad conmigo.

viernes, 25 de febrero de 2011

Habito 3 - Los siete hábitos de la gente altamente efectiva

LECCIÓN 056 Para los repasos de mañana y noche: Lección 26-30

LECCIÓN 056

Para los repasos de mañana y noche: Lección 26-30

Nuestro repaso de hoy abarca lo siguiente:
(26) Mis pensamientos de ataque atacan mi invulnerabilidad.
¿Cómo puedo saber quién soy cuando creo estar sometido a continuos ataques? El dolor, la enfermedad, la pérdida, la vejez y la muerte parecen acecharme. Todas mis esperanzas, aspiraciones y planes parecen estar a merced de un mundo que no puedo controlar. Sin embargo, la seguridad perfecta y la plena realización constituyen mi verdadera herencia. He tratado de despojarme de mi herencia a cambio del mundo que veo. Pero Dios la ha salvaguardado para mi. Mis pensamientos reales me enseñarán lo que es mi herencia.
(27) Por encima de todo quiero ver.
Al reconocer que lo que veo es un reflejo de lo que creo ser, me doy cuenta de que mi mayor necesidad es la visión. El mundo que veo da testimonio de cuán temerosa es la naturaleza de la imagen que he forjado de mi mismo. Si he de recordar quién soy, es esencial que abandone esta imagen de mi mismo. A medida que dicha imagen sea reemplazada por la verdad, se me concederá la visión. Y con esta visión contemplaré al mundo y a mi mismo con caridad y con amor.
(28) Por encima de todo quiero ver de otra manera.
El mundo que veo mantiene en vigor la temerosa imagen que he forjado de mi mismo y garantiza su continuidad. Mientras siga viendo el mundo tal como lo veo ahora, la verdad no podrá alborear en mi conciencia. Dejaré que la puerta que se encuentra detrás de este mundo se abra, para así poder mirar más allá de él al mundo que refleja el Amor de Dios.
(29) Dios está en todo lo que veo.
Tras cada imagen que he forjado, la verdad permanece inmutable. Tras cada velo que he corrido sobre la faz del amor, su luz sigue brillando sin menoscabo. Más allá de todos mis descabellados deseos se encuentra mi voluntad, unida a la Voluntad de mi Padre. Dios sigue estando en todas partes y en todas las cosas eternamente. Y nosotros, que somos parte de Él, habremos de ver más allá de las apariencias, y reconocer la verdad que yace tras todas ellas.
(30) Dios está en todo lo que veo porque Dios está en mi mente.
En mi propia mente, aunque oculto por mis desquiciados pensamientos de separación y ataque, yace el conocimiento de que todo es uno eternamente. Yo no he perdido el conocimiento de Quién soy por el hecho de haberlo olvidado. Ha sido salvaguardado para mi en la Mente de Dios, Quien no ha abandonado Sus Pensamientos. Y yo, que me cuento entre ellos, soy uno con ellos y uno con Él.

jueves, 24 de febrero de 2011

LECCIÓN 055 Para los repasos de mañana y noche: Lección 21-25

LECCIÓN 055

Para los repasos de mañana y noche: Lección 21-25


El repaso de hoy incluye lo siguiente:

(21) Estoy decidido a ver las cosas de otra manera.

Lo que ahora veo no son sino signos de enfermedad, desastre y muerte. Esto no puede ser lo que Dios creó para Su Hijo bien amado. El hecho en sí de que vea tales cosas demuestra que no entiendo a Dios. Por lo tanto, tampoco entiendo a Su Hijo. Lo que veo me muestra que no sé quién soy. Estoy decidido a ver los testigos de la verdad en mi, en vez de aquellos que me muestran una ilusión de mi mismo.

(22) Lo que veo es una forma de venganza.

El mundo que veo no es en modo alguno la representación de pensamientos amorosos. Es un cuadro en el que todo se ve atacado por todo. Es cualquier cosa menos un reflejo del Amor de Dios y del amor de Su Hijo. Son mis propios pensamientos de ataque los que dan lugar a este cuadro. Mis pensamientos amorosos me librarán de esta percepción del mundo y me brindarán la paz que Dios dispuso que yo tuviese.

(23) Puedo escaparme de este mundo renunciando a los pensamientos de ataque.

En esto, y sólo en esto, radica la salvación. Si no albergase pensamientos de ataque no podría ver un mundo de ataque. A medida que el perdón permita que el amor retorne a mi conciencia, veré un mundo de paz, seguridad y dicha. Y esto es lo que elijo ver, en lugar de lo que ahora contemplo.

(24) No percibo lo que más me conviene.

¿Cómo podría reconocer lo que más me conviene si no sé quién Soy? Lo que yo creo que más me convendría no haría sino atarme aún más al mundo de las ilusiones. Estoy dispuesto a seguir al Guía que Dios me ha dado para descubrir qué es lo que más me conviene, reconociendo que no puedo percibirlo por mi cuenta.

(25) No sé cuál es el propósito de nada.

Para mi, el propósito de todas las cosas es probar que las ilusiones que abrigo con respecto a mi mismo son reales. Para eso es para lo que trato de usar a todo el mundo y todas las cosas. Para eso es para lo que creo que es el mundo. Por lo tanto, no reconozco su verdadero propósito. El propósito que le he asignado ha dado lugar a una imagen aterradora del mismo. Quiero que mi mente se vuelva receptiva al verdadero propósito del mundo renunciando al que le he asignado, y descubrir la verdad acerca de él.

miércoles, 23 de febrero de 2011

LECCIÓN 054 Para los repasos de mañana y noche: Lección 16-20

LECCIÓN 054

Para los repasos de mañana y noche: Lección 16-20

Estas son las ideas para el repaso de hoy:
(16) No tengo pensamientos neutros.
Tener pensamientos neutros es imposible porque todos los pensamientos tienen poder. O bien dan lugar a un mundo falso o bien me conducen al mundo real. Pero es imposible que no tengan efectos. Del mismo modo en que el mundo que veo procede de mis errores de pensamiento, así también el mundo real se alzará ante mis ojos cuando permita que mis errores sean corregidos. Mis pensamientos no pueden ser simultáneamente verdaderos y falsos. Tienen que ser lo uno o lo otro. Lo que veo me muestra si son verdaderos o falsos.
(17) No veo cosas neutras.
Lo que veo da testimonio de lo que pienso. Si no pensase no existiría, ya que la vida es pensamiento. Permítaseme mirar al mundo que veo como la representación de mi propio estado de ánimo. Sé que éste puede cambiar. Y sé asimismo que el mundo que veo puede cambiar también.
(18) No soy el único que experimenta los efectos de mi manera de ver.
Si no tengo pensamientos privados, no puedo ver un mundo privado. Incluso la descabellada idea de la separación tuvo que compartirse antes de que se pudiese convertir en la base del mundo que veo. Sin embargo, cuando se compartió esa idea no se compartió nada. Puedo invocar también mis pensamientos reales, los cuales comparto con todo el mundo. Así como mis pensamientos de separación invocan pensamientos de separación en otros, mis pensamientos reales despiertan en ellos sus pensamientos reales. Y el mundo que mis pensamientos reales me muestran alboreará en su visión así como en la mía.
(19) No soy el único que experimenta los efectos de mis pensamientos.
No soy el único en nada. Todo lo que pienso, digo o hago es una enseñanza para todo el universo. Un Hijo de Dios no puede pensar, hablar o actuar en vano. No puede ser el único en nada. Tengo, por lo tanto, el poder de cambiar a todas las mentes junto con la mía porque mío es el poder de Dios.
(20) Estoy decidido a ver.
Puesto que reconozco que la naturaleza de mis pensamientos es que los comparto con todo lo que existe, estoy decidido a ver. Veré los testigos que me muestran que la manera de pensar del mundo ha cambiado. Veré la prueba de que lo que se ha obrado por mediación mía ha permitido que el amor reemplace al miedo, la risa a las lágrimas y la abundancia a las perdidas. Quiero contemplar el mundo real, y dejar que me enseñe que mi voluntad y la Voluntad de Dios son una.

martes, 22 de febrero de 2011

LECCIÓN 053 Para los repasos de mañana y noche: Lección 11-15

LECCIÓN 053

Para los repasos de mañana y noche: Lección 11-15

Hoy repasaremos lo siguiente:
(11) Mis pensamientos sin significado me están mostrando un mundo sin significado.
Dado que los pensamientos de que soy consciente no significan nada, el mundo que los refleja no puede tener significado. Lo que da lugar a este mundo es algo demente, como lo es también el resultado de ello. La realidad no es demente, y yo tengo pensamientos reales así como dementes. Por lo tanto, puedo ver un mundo real, si recurro a mis pensamientos reales como guía para ver.
(12) Estoy disgustado porque veo un mundo que no tiene significado.
Los pensamientos dementes perturban. Dan lugar a un mundo en el que no hay orden de ninguna clase. Sólo el caos puede regir en un mundo que representa una manera de pensar caótica, y el caos es la ausencia total de leyes. No puedo vivir en paz en un mundo así. Estoy agradecido de que este mundo no sea real, y de que no necesito verlo en absoluto, a menos que yo mismo elija otorgarle valor. Elijo no otorgarle valor a lo que es completamente demente y no tiene significado.
(13) Un mundo sin significado engendra temor.
Lo que es totalmente demente engendra temor porque no se puede contar con ello en absoluto, ni da pie a que se le tenga confianza. En la demencia no hay nada en lo que se pueda confiar. No ofrece seguridad ni esperanza. Pero un mundo así no es real. Le he conferido la ilusión de realidad y he sufrido por haber creído en él. Elijo ahora dejar de creer en él y depositar mi confianza en la realidad. Al elegir esto, me escaparé de todos los efectos del mundo del miedo porque estaré reconociendo que no existe.
(14) Dios no creó un mundo sin significado.
¿Cómo puede ser que exista un mundo sin significado si Dios no lo creó? Él es la Fuente de todo significado y todo lo que es real está en Su Mente. Está en mi mente también porque Él lo creó conmigo. ¿Por qué he de seguir sufriendo por los efectos de mis pensamientos dementes cuando la perfección de la creación es mi hogar? Quiero recordar el poder de mi decisión y reconocer mi verdadera morada.
(15) Mis pensamientos son imágenes que yo mismo he fabricado.
Todo lo que veo refleja mis pensamientos. Son mis pensamientos los que me dicen dónde estoy y lo que Soy. El hecho de que vea un mundo en el que hay sufrimiento, en el que se puedan experimentar pérdidas y en el que se pueda morir, me muestra que lo único que estoy viendo es la representación de mis pensamientos dementes, y que no estoy permitiendo que mis pensamientos reales viertan su benéfica luz sobre lo que veo. No obstante, el camino de Dios es seguro. Las imágenes que he fabricado no pueden prevalecer contra Él porque no es mi voluntad que lo hagan. Mi voluntad es la Suya, y no antepondré otros Dioses a Él.

lunes, 21 de febrero de 2011

Lección 52 repaso de las lecciones 6-10

Lección 52 repaso de las lecciones 6-10
El repaso de hoy abarca las siguientes ideas:
(6) Estoy disgustado porque veo algo que no está ahí.
La realidad no es nunca atemorizante. Es imposible que pudiese disgustarme. La realidad sólo brinda perfecta paz. Cuando estoy disgustado es porque he reemplazado la realidad con ilusiones que yo mismo he fabricado. Las ilusiones me causan disgusto porque al haberles conferido realidad, veo la realidad como una ilusión. Nada en la creación de Dios se ve afectado en modo alguno por mi confusión. Siempre estoy disgustado por nada.
(7) Sólo veo el pasado.
Cuando miro a mi alrededor, condeno el mundo que veo. A eso es a lo que yo llamo ver. Uso el pasado en contra de todo el mundo y de todas las cosas, convirtiéndolos así en mis enemigos. Cuando me haya perdonado a mi mismo y haya recordado Quién soy, bendeciré a todo el mundo y a todo cuanto vea. No habrá pasado, y, por lo tanto, tampoco enemigos. Y contemplaré con amor todo aquello que antes no podía ver.
(8) Mi mente está absorbida con pensamientos del pasado.
Veo únicamente mis propios pensamientos, y mi mente está absorbida con el pasado. ¿Qué es lo que puedo ver, entonces, tal como es? Permítaseme recordar que me fijo en el pasado para prevenir que el presente alboree en mi mente. Permítaseme entender que estoy tratando de usar el tiempo en contra de Dios. Permítaseme aprender a dejar atrás el pasado, dándome cuenta de que al hacer eso no estoy renunciando a nada.
(9) No veo nada tal como es ahora.
Si no veo nada tal como es ahora, ciertamente se puede decir que no veo nada. Solamente puedo ver lo que está aquí ahora. La elección no es entre si ver el pasado o el presente; la elección es sencillamente entre ver o no ver. Lo que he elegido ver me ha costado la visión. Ahora quiero elegir de nuevo, para poder ver.
(10) Mis pensamientos no significan nada.
No tengo pensamientos privados. Sin embargo, es únicamente de mis pensamientos privados de los que soy consciente. ¿Que significado pueden tener dichos pensamientos? No existen, de modo que no significan nada. No obstante, mi mente es parte de la creación y parte de su Creador. ¿No sería acaso preferible que me uniese al pensamiento del universo en vez de obscurecer todo aquello que realmente me pertenece con mis míseros e insignificantes pensamientos "privados"?

martes, 15 de febrero de 2011

Habito 2 - Los siete hábitos de la gente altamente efectiva

EL Helecho y el Bambú

EL  Helecho y el Bambú 
Un día decidí darme por vencido.renuncié a mi  trabajo, a mi relación,  a mi espiritualidad. Quería renunciar a mi vida.
Fui al bosque para  tener una última charla con Dios.
"Dios", le dije. "¿Podrías darme una buena razón para no darme por vencido?" Su respuesta me sorprendió."
Mira a tu alrededor", El dijo:
"Ves el helecho y el bambú?"
"Sí", respondí. 




 "Cuando sembré las semillas del helecho y el bambú, las cuidé muy bien. Les di luz. Les  di agua. El helecho rápidamente creció. 
Su verde  brillante cubría el  suelo. Pero nada salió de la semilla de bambú. Sin embargo no renuncié al bambú.
 En el segundo año el helecho creció más brillante y  abundante. Y nuevamente, nada creció de la semilla de bambú. Pero  no renuncié al bambú." Dijo Él.
 "En el tercer año, aun nada brotó de la semilla de bambú. Pero no renuncié." Me dijo.
"En el cuarto año, nuevamente, nada salió de la semilla de bambú.
"No renuncié" dijo. 


"Luego en el quinto año un pequeño brote salió  de la tierra. 
En comparación con el helecho era aparentemente muy pequeño  e insignificante. Pero sólo 6 meses después el bambú creció a más de 100 pies de altura.  Se la había pasado cinco años echando raíces.
Aquellas raíces lo  hicieron fuerte y le dieron lo que necesitaba para sobrevivir. 


"No le daría a ninguna de mis creaciones un reto que no pudiera sobrellevar" Él me dijo. "¿Sabías que todo este tiempo que has estado luchando, realmente has estado echando raíces?"
"No  renunciaría al bambú. Nunca renunciaría a ti. No te compares con otros" Me dijo. "El bambú tenía un propósito diferente al del helecho, sin embargo, ambos eran necesarios y hacían del bosque un lugar hermoso". 

"Tu tiempo vendrá" Dios me dijo. "¡Crecerás muy alto!"
"¿Qué tan alto debo crecer?" Pregunté.
"¿Qué tan alto  crecerá el bambú?" Me preguntó en respuesta.
"¿Tan alto como pueda?" Indagué.
Espero que estas palabras  puedan ayudarte a entender que Dios nunca renunciará a ti.
Nunca te arrepientas de un día en tu vida. Los buenos días te dan felicidad. Los malos días te dan  experiencia. Ambos son esenciales para la vida. Continúa.
   
La felicidad te mantiene Dulce, 


Los intentos te mantienen Fuerte,
Las penas te mantienen Humano,
Las caídas te mantienen Humilde,
El éxito te mantiene Brillante.
Pero sólo Dios te mantiene Caminando... 





Publicado por Yris Araujo

Habito 1 - Los siete hábitos de la gente altamente efectiva

Los siete hábitos de la gente altamente efectiva, Stephen R. Covey


Los paradigmas son los elementos que constituyen el marco de referencia desde el cual cada individuo mira la realidad. Determinados paradigmas causan la adopción de ciertos principios de vida que comúnmente tienen bastantes aspectos erróneos. El hecho de tener apertura para cambiar de paradigmas es la premisa con la cual el autor compromete al lector para proceder al análisis de los hábitos.
El desarrollo personal transcurre en tres etapas.

[editar]Victoria privada

Las metas personales a seguir en el futuro, en el corto y largo plazo. Muy importante en este apartado es la definición de la misión personal, para lo cual Covey provee ejemplos y herramientas de trabajo.
• Hábito 1: La proactividad otorga la libertad para poder escoger nuestra respuesta a los estímulos del medio ambiente. Nos faculta para responder (responsabilidad) de acuerdo con nuestros principios y valores. Ésta es la cualidad esencial que nos distingue de los demás miembros del reino animal. En esencia, es lo que nos hace humanos y nos permite afirmar que somos los arquitectos de nuestro propio destino.
• Hábito 2: Comenzar con un fin en mente hace posible que nuestra vida tenga razón de ser, pues la creación de una visión de lo que queremos lograr permite que nuestras acciones estén dirigidas a lo que verdaderamente es significativo en nuestras vidas. Después de todo, para un velero sin puerto cualquier viento es bueno.
• Hábito 3: Primero lo primero. Como corolario del proceso de victoria privada, después de adoptar el hábito de la proactividad que permitirá asumir responsabilidad, y habiendo definido el fin que se desea alcanzar, es esencial saber cuál es el siguiente paso. Este capítulo trata sobre eso. Se sugieren herramientas y métodos de priorización. Además incluye un cuadro en el que muestra las cosas urgentes y las importantes haciendo referencia a las personas que por no priorizar tareas su vida se mantiene en constantes actividades urgentes y continuo afan haciendo de este una persona reactiva.

[editar]Victoria pública

La victoria pública está relacionada con la transición de la independencia hacia el ganar/ganar. En las actividades en las que toca al individuo relacionarse con otras personas, puede pensar de cuatro maneras: perder/perder (no me importa perder, si tú pierdes), perder/ganar (perderé aunque tu ganes) y sus correspondientes ganar/perder (te haré perder), y ganar ganar (podemos hacer algo en que ambos salgamos beneficiados). El término sinergia significa que el todo es mayor que la suma de las partes.
• Hábito 4: Pensar en ganar/ganar (beneficio mutuo) nos permite desarrollar una mentalidad de abundancia material y espiritual, pues nos cuestiona la premisa de que la vida es un «juego de suma cero» donde para que alguien gane, alguien tiene que perder. Cuando establecemos el balance entre nuestros objetivos y los objetivos de los demás podemos lograr el bien común. Cuando nuestra determinación se balancea con la consideración para con los demás, estamos sentando las bases para la convivencia y la equidad entre los seres humanos.
• Hábito 5: Buscar comprender primero y después ser comprendido es la esencia del respeto a los demás. La necesidad que tenemos de ser entendidos es uno de los sentimientos más intensos de todos los seres humanos. Este hábito es la clave de las relaciones humanas efectivas y posibilita llegar a acuerdos de tipo ganar/ganar.
• Hábito 6: Sinergizar es el resultado de cultivar la habilidad y la actitud de valorar la diversidad. La síntesis de ideas divergentes produce ideas mejores y superiores a las ideas individuales. El logro de trabajo en equipo y la innovación son el resultado de este hábito.


Renovación

En esta parte se explica el proceso de cambio, no cíclico sino lineal, a partir de las victorias anteriores, en un plan de llegar al cambio personal.
•Hábito 7: Afilar la sierra (mejora constante) es usar la capacidad que tenemos para renovarnos en las cuatro dimensiones: física, emocional, mental y espiritual. Es lo que nos permite establecer un balance entre todas las dimensiones de nuestro ser, a fin de ser efectivos en los diferentes papeles (roles) que desempeñamos en nuestras vidas.

Publicado por Yris Araujo

Los 7 Habitos de la Gente Altamente Efectiva